PARA QUE USAMOS LAS APLICACIONES DE ESPIONAJE – Es normal sentir celos cuando estás en una relación, pero nunca hay que permitir que estos sean si excesivos. Vivimos en sociedad y nadie es propiedad de nadie. Compartimos nuestro paso por la vida con otras personas, no somos propietarios de la vida de nadie. Con los celos lo mejor es tratar siempre de controlarlos.
Hay cosas que no deberíamos hacer, por ejemplo estar pendientes de el móvil de él o ella. Revisar sus mensajes denota que no le tienes confianza. No tiene nada de malo no saber con quién conversa o chatea, una relación se basa en la confianza y si esta no existe, entonces mal va la relación. Por otro lado, tampoco debiéramos tener una conducta irrespetuosa con nuestra pareja y generar desconfianza. Se que es un equilibrio difícil pero la clave está en la mezcla de libertad, compromiso, acuerdo y respeto mutuo. Si tienes mucha curiosidad por saber, pregunta sin miedo, de esa forma él o ella no sentirá que tienes celos ni presionada o presionado.
Cada miembro de la pareja tiene que tener su espacio y haga lo que le gusta hacer sin sentir que todo el tiempo está controlado. He oído a chicas decir “yo a este lo tengo controlado, que no me fío”, y cosas parecidas y aún peores he oído a chicos muy jóvenes. Eso no está nada bien, como tampoco estar llamando constantemente.
Hay incluso quienes utilizan aplicaciones, que pueden servir bien si se les da un uso correcto. Por ejemplo estar localizados en prevención de accidente en viaje, excursión y cosas similares. Como la tecnología avanza que es una barbaridad ya hasta en WhatsApp se puede espiar gratis. Existen aplicaciones para Espiar WhatsApp. Por ejemplo con Master Spy la aplicación espía. Esta aplicación nos permite tener muchas funciones en una misma herramienta. Del uso que le demos dependerá que seamos una persona previsora para evitar atracos o accidentes, y mil aplicaciones más para nuestra seguridad o un celoso o celosa compulsivo o compulsiva de tres al cuarto. También puede darse el caso que seamos un secreto miembro de la CIA y necesitemos espiar conversaciones de políticos corruptos y peligrosos para la paz mundial…
PARA QUE USAMOS LAS APLICACIONES DE ESPIONAJE
La fiabilidad de esta aplicación es tal que la persona espiada no sabrá que alguien ha podido hackear su Whatsapp.
Hoy cualquiera puede pinchar un celular y saber todo del otro, con quién habla, dónde se encuentra y qué piensa. Por la tecnología móvil, que llevan en el bolsillo casi todos, todo el día, las peores pesadillas de la sociedad de control se están convirtiendo en realidad. Orwell se ha quedado obsoleto. Mercedes Milá, me temo que vas a tener que dedicarte a hacer rosquillas.
La intromisión la logran mediante un software espía que puede ser controlado por cualquier persona desde su propio móvil. Para espiar, el invasor se apropia del teléfono a intervenir y le carga un software que se baja de Internet. Bastan diez minutos para instalar y configurar el programa. Una vez hecho esto el equipo será monitoreado las 24 horas los 365 días del año que dure la licencia del programa, pudiéndose renovar. Así se publicitan estos programas.
Sabemos que estos espías digitales ya se usan en empresas que pretenden espiar al personal jerárquico. También en ambientes familiares, para saber qué están haciendo los hijos. Y no faltan esos amantes celosos que quieren saber si su pareja los engaña.
Los consejeros profesionales explican que casos de celos les llegan a sus consulta con frecuencia en las terapias de matrimonio. Ellos y ellas dicen que lo primero que hay que entender es que todos los seres humanos celamos en algún momento o situación, pero esto no puede convertirse en una conducta irracional. De su experiencia detallan que al toparse con una persona celosa procuran conocer cuáles son los diferentes marcos de referencia.
PARA QUE USAMOS LAS APLICACIONES DE ESPIONAJE
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Bueno, mejor no hablo de esto y sigo con lo que iba…
Los celos sí pueden partir desde la inseguridad de la persona, pero hay que tener el marco de referencia. Puede ser que lo vieron en el modelo de los padres, o que vienen de una relación anterior donde hubo infidelidad. Es muy común. Hay que conocer la experiencia previa. También existen los “celos apostólicos” referentes a una denominación religiosa y los “celos profesionales”. Lo que no se puede permitir es una conducta de celos enfermizos que propicien el hostigamiento, la persecución y hasta el atentar contra la vida de otra persona.
